Este consistorio ya sabemos que no le interesa para nada conservar el patrimonio cultural de la ciudad, pero lo que no esperábamos es que además lo destruyera, ya sabíamos de la ineptitud del concejal en cuestión, pero llegar a destruir una plaza de mármol años de historia, es lo más aberrante que se puede hacer. Así mientras desde la concejalía echan balones fuera contra la dirección de obra, esta se resarce alegando que se podía haber retirado sin dañarla, pero que cumplen las ordenes muy obedientes.
Desde Lo Nostre reprobamos esta destrucción del patrimonio por parte del consistorio, entendiendo que es un claro ejemplo de su desinterés manifiesto y de que su único objetivo es el vanguardismo y la dispersión del intelecto en su ideología retorcida y aberrante, por ello exigimos que se restaure la plaza de mármol y que se tomen las medidas efectivas con el fin de no causar más destrozos al ya maltrecho patrimonio por la falta de conservación.